Aunque existe un marco para prevenir y gestionar los conflictos de intereses en el gasto de la UE, hay lagunas en el fomento de la transparencia y en la detección de situaciones de riesgo. Así se desprende de un nuevo informe del Tribunal de Cuentas Europeo (el Tribunal) sobre el modo en que se aborda este problema en las políticas agrícolas y de cohesión, los mayores ámbitos de gasto de la UE.
«Teniendo en cuenta la legislación revisada y algunos casos recientes, queríamos verificar si la Comisión Europea y los Estados miembros abordaban adecuadamente los conflictos de intereses en la política agrícola común y en la política de cohesión», afirma Pietro Russo, miembro del Tribunal que dirigió la auditoría. «Constatamos que, pese a los esfuerzos desplegados para resolver el problema, persisten las lagunas. Para poder contar con datos claros sobre los importes afectados por conflictos de intereses, debería mejorar la notificación de casos concretos».